Cuando los medios de comunicación masivos pierden su credibilidad y se convierten en tristes marionetas del sistema que los utiliza solo como pieza de mercadeo, entonces dónde debe manifestarse la palabra?
Hace algún tiempo los medios de comunicacion fueron reconocidos como el cuarto poder, el que se agregaba a los tres establecidos por Montesquieu, pero el poder real no radica en el medio como tal o en la manera de difundirlo sino en La Palabra.
La Palabra debería reconocerse no ya como un cuarto poder sino como el que se encuentra encima de todos, el que reafirma, fomenta, promueve y transforma la verdadera democracia, el contexto social en que se realiza y la misma
dignidad humana.
Promover ideas propias en un sistema en el que no son reconocidas como útiles las cosas que no venden o consumen es un tanto un camino cuesta arriba. Y vaya si se dificulta teniendo en cuenta los altos precios que deben pagarse por difundir masivamente algo. Esto se debe a que el Mercadeo nos sigue visualizando como animales de consumo...y cómo no! si nos portamos como tal.
Hacer conciencia social sobre problemas que nos afectan directamente como cambio climatico, talas indiscriminadas de árboles,consecuencias del uso de pesticidas o abonos químicos, contaminación del aire, del agua, de ruido, entre otros, se presenta de manera hasta desilucionante a la hora de tratar de promoverlas a gran escala.
¿Cuánto sabemos sobre contaminación visual? ¿Hemos notado la cantidad cada vea mas grande de pancartas, vallas, autobuses y automoviles pintados y todo tipo de publicidad exterior que se mantiene frente a nosotros las 24 horas del día recordándonos que debemos consumir?
Resulta muchas veces hasta ofensivo ver como grandes pilares que sostienen esa publicidad aérea muchas veces se encuentran dentro de casa de habitación, en la que probablemente no alcanza para pagar una canasta de mercado. Es la misma contaminación la que nos distrae de lo que deberíamos de estar discutiendo.
¿Cuál es el temor real a la libertad de expresión cuando más de la mitad del períodico es publicidad? ¿Existen verdaderos espacios de opinión? La Palabra entonces debe irse abriendo brecha entre tanta publicidad y propaganda alucinante que se desborda por todos lados para ocultar lo que realmente es importante.No se debe ocultar la Verdad ni perder la esperanza de que un día todas las conciencias serán completamente libres para poder escucharla y comprenderla.
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:: Yami Flores.
Hace algún tiempo los medios de comunicacion fueron reconocidos como el cuarto poder, el que se agregaba a los tres establecidos por Montesquieu, pero el poder real no radica en el medio como tal o en la manera de difundirlo sino en La Palabra.
La Palabra debería reconocerse no ya como un cuarto poder sino como el que se encuentra encima de todos, el que reafirma, fomenta, promueve y transforma la verdadera democracia, el contexto social en que se realiza y la misma
dignidad humana.
Promover ideas propias en un sistema en el que no son reconocidas como útiles las cosas que no venden o consumen es un tanto un camino cuesta arriba. Y vaya si se dificulta teniendo en cuenta los altos precios que deben pagarse por difundir masivamente algo. Esto se debe a que el Mercadeo nos sigue visualizando como animales de consumo...y cómo no! si nos portamos como tal.
Hacer conciencia social sobre problemas que nos afectan directamente como cambio climatico, talas indiscriminadas de árboles,consecuencias del uso de pesticidas o abonos químicos, contaminación del aire, del agua, de ruido, entre otros, se presenta de manera hasta desilucionante a la hora de tratar de promoverlas a gran escala.
¿Cuánto sabemos sobre contaminación visual? ¿Hemos notado la cantidad cada vea mas grande de pancartas, vallas, autobuses y automoviles pintados y todo tipo de publicidad exterior que se mantiene frente a nosotros las 24 horas del día recordándonos que debemos consumir?
Resulta muchas veces hasta ofensivo ver como grandes pilares que sostienen esa publicidad aérea muchas veces se encuentran dentro de casa de habitación, en la que probablemente no alcanza para pagar una canasta de mercado. Es la misma contaminación la que nos distrae de lo que deberíamos de estar discutiendo.
¿Cuál es el temor real a la libertad de expresión cuando más de la mitad del períodico es publicidad? ¿Existen verdaderos espacios de opinión? La Palabra entonces debe irse abriendo brecha entre tanta publicidad y propaganda alucinante que se desborda por todos lados para ocultar lo que realmente es importante.No se debe ocultar la Verdad ni perder la esperanza de que un día todas las conciencias serán completamente libres para poder escucharla y comprenderla.
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:: Yami Flores.
1 comentario:
Solo una mujer sabia puede escribir tan sencillo pero muy profundo, la admiro mucho
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