Esta protesta no es la primera, hace menos de 3 meses se dio otra manifestación similar y antes se habían dado otras protestas con el mismo objetivo.
El problema de la contaminación ocasionada por MIDES parece ser de carácter permanente, los vecinos protestan porque la carretera que conduce al botadero y que atraviesa las comunidades de la zona, está hecha de tierra y cuando pasan los centenares de camiones a depositar la basura van regando inmundicias por todos lados y ocasionando una polvareda que tiene a los habitantes al borde de la desesperación.
La causa fundamental de este problema es que MIDES ve a la recolección y disposición de basura única y exclusivamente como un negocio lucrativo, o sea no le interesa invertir para tener un proceso menos contaminante y respetuoso de las comunidades, ni tampoco le interesa obtener ganancias justas, ya que cobra cuotas excesivas que están llevando a varias municipalidades al borde de la quiebra y obligándolos a realizar manejo de desechos que tampoco es el adecuado desde la perspectiva ambiental. En adición a los motivos de protesta hay otras fuentes de contaminación generadas por MIDES que los habitantes de la zona no han señalado, producto del mal manejo de los lixiviados y el tratamiento inadecuado de la basura recolectada.
Dando muestras de cinismo extremo, MIDES acusa al Ministerio del Ambiente que anda promoviendo botaderos de basura contaminantes, como quien dice el burro hablando de orejas...
Esta crítica no la hace en forma directa sino que ha formado un grupo que le ha puesto un nombre ambiental dando a entender que se trata de una organización ambientalista y paga páginas enteras en los periódicos de mayor circulación, buscando en forma descarada que el MARN no promueva rellenos sanitarios en el país y siga MIDES ejerciendo una posición casi monopólica del manejo de la basura.
El problema podría resolverse si el Gobierno Central buscara la forma de intervenir legalmente la gestión de los desechos, algo parecido a lo que hace con el transporte público, el agua o la electricidad.
El Gobierno debería poner las cuotas a cobrar en la recolección y disposición final, así como legislar el proceso a fin de que al relleno solo llegue la basura que no se puede procesar.
Todo lo que sean desechos orgánicos deben ser regresados a la tierra y lo que se puede reciclar debe terminar en centros de acopio para ese fin, claro que todo esto debe ir acompañado de un proceso educativo tanto para el personal de las Alcaldías como la población de las comunidades, ya que lo fundamental en la gestión sustentable de los desechos es reducir al mínimo la basura generada y esto requiere, entre otras cosas, una campaña educativa orientada a desanimar el consumo irresponsable.
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